¿Encuestas o Propuestas? Elección de Candidatos a la luz de una Alianza

Aunque ya han pasado algunos días y aunque tal vez el hecho no es ya notica, quiero compartir con mis lectores la opinión que me merece el proceso de alianza que se ha dado entre el Partido de Liberación Dominicana (partido del  cual soy miembro desde que nací, pero formalmente desde que cumplí mi mayoría de edad) y el Partido Reformista Social Cristiano, así como también lo que ha sido el proceso de escogencia de candidatos.

Con miras a obtener el control municipal y congresional en las próximas elecciones del 16 de mayo de este año, los diferentes partidos políticos del sistema electoral dominicano, se han sumergido en un proceso de negociaciones con el fin de pactar alianzas que les permitan cumplir con esta meta. En ese sentido el bloque progresista, encabezado por el PLD, ha decidido incorporar al Partido Reformista Social Cristiano al grupo de organizaciones políticas que darán su respaldo a dicho bloque en estas elecciones, acción que desde mi punto de vista debilitara institucional y electoralmente al PLD.

En el año 2006 se dio en nuestro país la denominada alianza “Rosada” que agrupaba al PRSC y al PRD y a sus respectivos aliados para enfrentar al PLD y al “Bloque Progresista”. En esas elecciones el PLD, sin necesidad de ir aliado al PRSC, logro la mayor votación de su historia en elecciones como estas. Dichas elecciones sin embargo reflejaron la mayor derrota en mucho tiempo para el PRD.

Si hacemos brevemente un análisis pre y post alianza rosada, nos daremos cuenta el porqué de mi temor sobre la alianza que hoy se da con el PRSC y el PLD la cual rechazaron antes los reformistas.

En los meses previos a las elecciones del 2006 los periódicos locales daban cuenta de la quejas de varios dirigentes peredeistas que habían sido desplazados producto de la alianza rosada, hecho que origino una ola de inconformidad y dio al traste con la salida de varios de estos dirigentes que fueron a apoyar al PLD, en el caso de San Cristóbal por ejemplo, se producían asaltos al ayuntamiento de Haina por parte de candidatos a regidores excluidos de la boleta y la renuncia del entonces presidente del PRD en el municipio del Cacao Irving Corporan, quien había ganado la convención interna de su partido con más del 70 por ciento de los votos. Mientras que los dirigentes del PRSC como el doctor Mario Piña, ex procurador fiscal de Santiago definía la alianza como un engaño por parte del PRD.

Entre alegatos de engaño, insatisfacciones, caos y un resultado posterior que dejo al partido mayoritario, el PRD, mal parado en el congreso y los ayuntamientos, esta alianza se consumó dándole al PRSC la ganancia total en ese proceso.

Desde mi óptica la alianza que se da para este año 2010 (PLD-PRSC) dejara al PLD debilitado institucionalmente y menguado electoralmente independientemente de los resultados post electorales. Al igual que en los meses previos a las elecciones del 2006 cuando en el PRD se producían reclamos, renuncias e inconformidades, de esa misma manera hoy en el PLD se producen manifestaciones de rechazo a esa alianza que anclara al PLD y que no podrá justificar la perdida de activos valiosos como es el caso de un dirigente serio, honesto, capas, ejemplar, luchador y defensor del PLD desde su génesis como lo fue y lo seguirá siendo Gilberto Serulle, quien fue víctima de esta alianza, la cual pretende que el partido que saco más de un 53 por ciento  en las elecciones del 2008 y que en las elecciones del 2006 con el PRSC en contra saco 24 senadores sea  sometido, sin razón aparente, a cargar con un partido que va en franco deterioro, en caída libre.

Esta alianza ha sido igual o más traumática que la alianza rosada, con el agravante de que los reformistas solo han reconocido al presidente de la república como único interlocutor válido ante este proceso de alianza, desconociendo que este partido ha sido construidos por hombres y mujeres que han aportado igual o más que el señor presidente para que hoy el PLD sea lo que es. Se ha llegado incluso a ofender a figuras del Comité Político con hechos como descalificaciones o descortesías en la misma puerta del despacho del presidente.

El presidente es la principal figuara a la hora de negociar, mas no el único dado que las decisiones de esta alianza la asumirá al PLD en su cojunto, asi como la responsabilidad a la hora de tener que salir a realizar el proselitismo a favor de los y las candidatas PLD-PRSC.

La militancia peledista tendrá que asumir los retos de esta alianza sin entender aun el porqué  el PLD tiene que darle tantas candidaturas a un partido que ni siquiera puede electoralmente justificar los cargos que tiene en el gobierno que van desde ministros y secretarios de Estado hasta directores generales, pasando por asesores y hasta embajadores.

El PLD tendrá que saber que tanto le da al PRSC porque en esa misma medida tendrá que responder ante los demás aliados del Bloque Progresista quienes podrán exigir como bloque el mis tratos en caso de que ellos aporten la misma cantidad de votos.

Como partido hemos acudido a una alianza con el PRSC sin medir ni siquiera la calidad de los candidatos propuesto por dicho partido, incluso cuando se presenta el escenario de tener que apoyar en Santiago a un candidato que ha sido señalado por el propio PLD como uno de los funcionarios municipales más corruptos que ha tenido Santiago y el país. Ante esta situación lo que dice la dirección de mi partido encabezada por el compañero presidente Dr. Leonel Fernández Reyna es que el que tenga mayor popularidad en las encuestas es el que debe ser candidato, ósea que ¿si Alí Baba y sus 40 ladrones aparecieren punteros en las encuestas pudieran ser nuestros candidatos a alcaldes, diputados y senadores? El candidato de Santiago ha sido postulado por los tres partidos en las ultimas 3 elecciones.  Si el famoso Bin Laden tuviera una gran popularidad no quisiera ni imaginarme a qué posición podría aspirar en nuestro país.

El hecho de que el PRSC necesite del ayuntamiento de Santiago para seguir alimentado su militancia no tiene que convertirse en el pesar de esa ciudad y no tenemos nosotros que convertirnos en cómplices de esa acción ambiciosa y perversa. Pidamos hechos no promesas, pidamos seriedad no popularidad, pidamos propuestas no encuestas.

Al final de este proceso tendremos que analizar como partido el beneficio para el PLD y no para nadie en particular, si es conveninte mantener una alianza tan costosa con esta organización política que al tiempo que nos ha dado su apoyo también nos ha desnaturalizado como partido a tal punto que ya hemos aprendido a exclamar el vuelve y vuelve…

Dado el comportamiento de nuestro partido al escribir las iniciales de nuestro fundador (JB) quizás nos cueste trabajo saber si fue JUAN BOSCH u otro.